beach boys

Jesús Fiochi: “La sensación de ingravidez y la adrenalina es lo que engancha del surf”

jesus-fiochi-pionero-surf-liencresJesús Fiochi. Pionero del surf. Trajo la primera tabla a una costa española en 1963. Una película que vio en el cine de los Kostkas en la que un hawaiano cogía olas pequeñas le dio la pista. “Yo quería hacer lo mismo”. Movió Roma con Santiago hasta que pudo hacerse con una. Su hermana, que vivía en Francia, le compró una ‘Barland’ roja que trajo desde Irún a Santander el autobús del Racing. “Me llegó a la oficina y pensaban que era una piragua”. Pero no. Se metió en el Sardinero y el primer día se puso de pie. Le ayudó ser nadador de competición. “Tenía unos brazos robustos con los que era fácil remar a gran velocidad”. Descubrió su pasión. ¿Qué tiene el surf? Se le iluminan los ojos, crece su sonrisa. “Es lo mejor de todo. Es una sensación de ingravidez cuando te empuja la ola y de adrenalina cuando ves la pared de agua que quiere comerte. Es lo mejor de la vida”. Y disfrutó del mar en solitario durante todo un año. “Cuenta la leyenda que tapé con tinta china el nombre de la marca y que decía que la había comprado en Australia”. Se ríe pícaro. “Es verdad”.

Seis de la mañana y Jesús Fiochi se tira de la cama. Se asoma a la ventana de su casa del Sardinero y mira el mar. Es lo primero que hace todos los días. Observa las olas, el viento que hace, la previsión del tiempo. “Si hay buena mar cojo la tabla y me voy a la playa en la que creo que va a haber mejores olas (Liencres, Laredo, San Vicente, Santa Marina, el Sardinero…), pero si el día no acompaña también me divierto con la caña”. A pie de playa o en su barco ‘Surf’, que atracado en Puertochico es prácticamente su sala de estar. “Ayer salí a 20 millas de Laredo, a por bonitos. No se dio mal. También me gusta ir a por lubinas”. Nos lo cuenta sentado en una preciosa cabina revestida de madera, con cañas colgadas del techo y aparejos y anzuelos sobre la mesa. Respira mar por todos los poros de su piel. La camisa que lleva mientras charlamos tiene un estampado de bonitos y calamares, el libro que reposa en uno de los bancos se titula ‘La vieja sirena’. Lo firma José Luis Sampedro. Suena su móvil y la melodía es una canción de los Beach Boys. Cualquiera diría que estamos en una película. El que llama pregunta por el tiempo. Una consulta tan frecuente que, con uno de sus hijos, montó la página www.fiochi.com que informa sobre el estado del tiempo en directo y enseña las olas de la Primera del Sardinero a través de una webcam.

Lleva seis años jubilado sin una pizca de aburrimiento encima. “Hay que llegar fuerte” y por eso entrena cuatro días a la semana nadando 700 metros en la piscina de Agustinos. “25 metros a tope como si fuese a por una ola, 25 metros descansando”. Porque la competencia en la playa es muy dura. “Las olas no se regalan, se luchan, aunque hay  jóvenes que reman más despacio para que la ola sea mía”. Alguna ventaja tenía que tener ser el veterano del surf en España. A sus pies, Jesús Fiochi.

jesus-fiochi-eva-miguelez-surf-puertochico-santander

jesus-fiochi-barco-surf