Las traineras las conocemos hoy en día como embarcaciones de competición y de recreo, pero su pasado histórico nos lleva a las artes de la pesca. De líneas finas, proa alzada y popa redonda resistía estupendamente a las olas del Cantábrico. Dicen que su nombre puede derivar de la palabra ‘traína’, una red de malla muy tupida utilizada para capturar bocarte y sardina. En esta foto que nos regala Cantabria y Santander en el recuerdo las vemos en Puertochico, alguna dejando la captura en tierra.