faro de la cerda

Los acantilados de la península de la Magdalena desde otro punto de vista

peninsula-magdalena-fernando-moro Verde y salvaje se ve la península de la Magdalena desde el cielo. La mirada de Fernando Moro nos enseña las lastras de los acantilados batidas por las olas, la envergadura del Palacio de la Magdalena que reina incluso desde las alturas y el apartado rincón en el que se levanta el faro de la Cerda. De entrada a la bahía la Horadada y la isla de la Torre marcan el camino hacia el centro de la ciudad. Gracias a Desde otro punto de vista por regalar estas fotos aérea a los lectores de El Tomavistas de Santander.

El faro que tiene dos nombres

faro-de-la-cerda-magdalena Curiosidades. Seguro que muchos de vosotros llamáis a este faro el de La Cerda. Su nombre proviene de la batería de defensa Santa Cruz de la Cerda que en el siglo XVII protegía la entrada a la bahía de los invasores. Pero tiene otro. De La Argolla por encontrarse cerca de un amarre donde llegaban los barcos con dificultades.

El faro de la Cerda abre la puerta de la bahía

faro-de-la-cerda-santanderCuriosidades. En los terrenos donde se ubica el faro de la Cerda, en el noreste de la península de la Magdalena, hubo una pequeña fortificación medieval. Es del siglo XIX, de planta cuadrada y se construyó para facilitar el acceso a los barcos a la bahía de Santander. Tiene varias alturas construidas en piedra y sillería en los esquinales. El faro de la Cerda está rematado con una balaustrada de hierro sobre la que se asienta la linterna.