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Serisan, unos locos de la impresión digital y de la arquitectura efímera que trabajan para Ikea, Frigo o Woman Secret desde Cantabria

El ritmo de trabajo de la fábrica de Serisan es imponente. Un plotter de tinta sin disolventes está imprimiendo el cartel del 25 aniversario del Palacio de Festivales, un operario está convirtiendo un contenedor en la futura oficina de turismo de Torrelavega, otro plotter está estampando una gráfica sobre un cartón que más tarde se convertirá en estantería, otro trabajador está pintando con spray una réplica en tamaño gigante de una tarrina de helado esculpida en porexpan… Imaginad la profesionalidad de esta empresa cántabra que marcas como Ikea, Woman Secret, Springfield, Forum Sport o Husqvarna les están encargando la fabricación de los elementos de sus escaparates y Unilever los carritos de helados Frigo. Todo lo que a una mente creativa se le ocurra para comunicar sus productos y servicios en formato gráfico Serisan se lo puede hacer.

Como muchas de las empresas que triunfan en Cantabria Serisan es familiar y de tamaño medio. Hoy da empleo a 37 personas. La fundó en 1973 Ángel Gómez, un trabajador incansable que a sus 76 años sigue yendo diariamente a la empresa. En aquellos tiempos Ángel imprimía el periódico Alerta de 3 a 6 de la madrugada, de 6 a 2 de la tarde trabajaba en una foto mecánica de Santander y por la tarde llevaba la representación de varias empresas. ¿Cuánto dormía?, le preguntamos. “Muy poco”, dice riendo. Su carácter emprendedor y curioso le llevó a apostar por la serigrafía cuando en Cantabria nadie sabía lo que era eso. Dejó el trabajo que le daba un sueldo fijo y se lanzó a la aventura.”Fue un éxito total”, nos dice Santiago Carrera, su sobrino, segunda generación de la empresa que junto a José Manuel Carrera y Ángel Manuel Gómez ahora lideran la empresa. “Todas las camisetas y pegatinas de la región las hacía Ángel, que se ocupaba de todas las tareas del negocio. Era comercial, hacía los fotolitos para la impresión, repartía los encargos…”, cuenta Santiago.

La innovación siempre ha estado en el ADN de Serisan. El segundo salto de calidad lo dieron en 1986 cuando compraron el primer plotter de corte que hubo en Cantabria y el cuarto de toda España. “Eso supuso toda una revolución”. El año anterior Serisan había hecho la rotulación de las calles de Santander de manera artesanal, recortando las letras una a una, colocándolas unas al lado de otras e imprimiendo. La nueva máquina tecnificaba todas estas tareas lo que ahorraba una cantidad de tiempo y de trabajo ingente. Serisan pasó de hacer artes gráficas a dar el salto hacia la rotulación. La compra de ese plotter de corte que suponía una inversión tremenda la tomó Ángel postrado en la cama por una neumonía. Ni la enfermedad pudo con el olfato de este empresario.

Santiago Carrera nos dice que lo digital no ha revolucionado tanto su sector como la llegada de aquel plotter en los años 80. Lo que provocó una evolución radical en su empresa en este siglo XXI fue la maldita crisis. “Nosotros éramos una compañía a la que le entraban los pedidos solos hasta que todo se paró. En los años 2012 y 2013 lo pasamos muy mal con despidos y ERES temporales, pero esto nos impulsó a crear una red comercial que no teníamos y a abrir una nueva línea de negocio con las construcciones efímeras de cartón”, dice Santiago. “Esto nos salvó. Dimos en el clavo”. En el último año y medio han contratado a 15 personas.

El cartón es barato, ecológico, ligero y te permite construir todo lo que tu imaginación idee. “Hacemos stands para ferias de exposiciones, mobiliario para el hogar, estructuras para mostrar productos en cualquier establecimiento, pequeños proyectos de packaging…”. Lo hacen con cartón, pero si el cliente quiere también fabrican con aluminio, madera, cristal… Serisan es hoy en día una empresa de impresión digital y un estudio de arquitectura de objetos.

Y siguen evolucionando. Cuando estuvimos con ellos estaban instalando un nuevo plotter que puede imprimir cartelería de gran formato para exteriores con textura. Nos dicen que es lo último. Y la vista ya la tienen puesta en la internacionalización. Facturan 2,7 millones de euros y creciendo. Desde aquí les deseamos toda la suerte del mundo porque Cantabria necesita empresas de éxito que sigan creando empleo. Gente valiente, con visión y miras altas, como Ángel, Santiago, José Manuel y Ángel Manuel .