A pasar la tarde remando por la bahía
El hotel Chiqui antes de su reforma y el Maria Isabel con su piscina
¡Qué tiempos! El hotel Maria Isabel y su piscina. Cuánta envidia me daban los turistas que se bañaban en ella y el Chiqui antes de su reforma. Y el paseo con los antiguos espigones. Muchas horas pescando ojitos he pasado en mi infancia sobre ellos. La imagen que nos regala Cantabria y Santander en el recuerdo está fechada en 1967. Y fijaos en la parte superior derecha. Era un cuartel de Carabineros y después de la Guardia Civil encargados de la vigilancia de la zona costera que va desde el Chiqui hasta el faro y todo Cueto.
Calma en Mataleñas
El temporal descubre en el Sardinero los restos de la terminal de cable telegráfico que unió Santander con Inglaterra
Curiosidades. El temporal de esta semana ha dejado a la vista los cimientos de la caseta de amarre del cable submarino que unió a España e Inglaterra en el siglo XIX. El cable telegráfico, que originariamente unía Bilbao e Inglaterra, fue trasladado a la capital cántabra en abril de 1874. Las tropas carlistas sitiaron Bilbao y la compañía propietaria del cable prefirió trasladar el punto de amarre a un lugar más seguro. La conexión, que se realizó como una solución temporal, se mantuvo a lo largo del tiempo y convirtió a Santander en un importante centro de comunicación telegráfica con Inglaterra. Hasta se reforzó la conexión con Madrid que, por aquel entonces, sólo contaba con una línea.
Amanece con velero, luna y sol
La península de la Magdalena y la playa del Camello irreconocibles en 1905
Los vecinos de Santander casi no habían tocado toda esta zona del Sardinero en 1905. El Camello más que un arenal es una zona de lastras y la península de la Magdalena, un lugar a la intemperie, un saliente pelado por la meteorología, sin apenas edificaciones y, lo que más llama la atención, sin árboles. En primer plano hay una serie de trabajadores junto a las vías del tren de Gandarillas que unió el centro de la ciudad con la primera del Sardinero desde 1875. El Centro de Documentación de la Imagen de Santander nos ha cedido esta imagen que firma Pablo Isidro Duomarco y que está dentro de la colección de Victor del Campo. Gracias al Ayuntamiento de Santander por compartir con El Tomavistas de Santander y sus lectores miradas históricas de la capital de Cantabria.
Resol en Costa Quebrada
Recolectores de algas trabajan duro en La Arnía
Rocío, la jardinera del Santander más noble
Había lío hoy en los Jardines de Piquío. Unos operarios estaban arrancando unos setos y plantando unos nuevos en su lugar. Con ellos, liderando la operación, nos hemos encontrado a Rocío. ¡Qué vitalidad! Es la encargada de que las zonas verdes del Santander más noble, desde Mesones hasta Reina Victoria luzcan impecables. A su cargo también está la península de la Magdalena. “Había dos bolas euonymus muy enfermas y las estamos cambiando. Estaban hechas una porquería porque la gente orina en ellas y ya no podíamos salvarlas”, nos cuenta. “Lo bonito de Piquío es que se vea todo bien, equilibrado y que te encuentres con la mar nada más entrar a dar un paseo”, dice, “así que hay una persona que trabaja todos los días en su cuidado. Limpia las flores de temporada que se colocan en los parterres, barre todas las escaleras, poda los setos…”. ¿Tú qué eres?, le preguntamos. “Jardinera, yo soy jardinera y muy afortunada porque me apasiona este oficio. Antes trabaja en Madrid, en el botánico, haciendo podas de altura pero tuve un accidente de tráfico”. Se vino para Santander y ahí la tienen, feliz, porque sacar brillo a un escenario como el de la capital de Cantabria tiene que ser bien gozoso.